Una flor para Martí

Han pasado 161 años desde su nacimiento en la calle de Paula y su ideario continúa vivo. Esta mañana miles de niños santaclareños tomaron las calles de la cuidad.

 Llevaban la alegría de la infancia. Sus padres los seguían de lejos con atención y dejaban constancia fotográfica del momento. El parque Vidal se inundó de colores. Decenas de Pilares, Meñiques y Bebés desfilaron frente a la Biblioteca Martí.

Las escuelas traían sus propias iniciativas para recordar al Apóstol. Volvían sobre los versos sencillos de unos de los poetas más ilustres de a literatura cubana.

 Las niñas caminaban acicaladas. Los más grandes portaban las banderas y encabezaban su escuela. Desde lejos podían verse las flores blancas. Muchas habían sido confeccionadas con papel, otras tenían la frescura de lo natural.

 Todas llegaron hasta el monumento del Apóstol ubicado en el Parque a los Mártires. Cuando terminó la Parada Martiana los niños se iban emocionados. En sus rostros se preciaba la emoción de haber llevado en sus manos pueriles una flor para Martí